(CNR) -- El anuncio del presidente Alan García para donar diez millones de dólares en favor del pueblo haitiano ha generado gran malestar causó entre los damnificados por el terremoto del 2007 en Ica.
Muchos consideran que, aunque el fin es bueno, el primer mandatario debe priorizar las necesidades de vivienda y educación que siguen sin ser resueltas a más de dos años del sismo que asoló el sur.
Entre esas voces se encuentra Ricardo Orellana, presidente de la Coordinadora Ciudadana por la Reconstrucción y el Desarrollo de Ica, quien consideró que la reconstrucción en esa parte del país peligra pues ahora ya no sólo Ica requiere de atención urgente.
Refirió que, debido a las intensas lluvias e inundaciones en Ayacucho, Cusco y parte de San Martín y Huánuco, corresponde al Ejecutivo "atender primero la casa".
"Si nuestra casa está resquebrajada, está cayéndose, tenemos que reforzarla y luego ver a los demás, si estamos en posibilidades de hacerlo", recalcó.
En el marco de la Reunión Extraordinaria de la Unión Sudamericana de Naciones (UNASUR), desarrollada en Ecuador, García Pérez se comprometió a donar 10 millones de dólares para la reconstrucción de Haití.
El jefe de Estado enfatizó que es “obligación” de los miembros de la organización ayudar a este país, devastado por el terremoto ocurrido el pasado 12 de enero. También pidió al Banco Mundial generar un crédito de al menos 200 millones de dólares que sea pagado por los países miembros de UNASUR.
Frecia Castilla – CODEHICA
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