FOTO TOMADA EN: ESQ. DE LIMA Y CUTERVO |
De una a esta parte el consumo de productos naturales viene en aumento debido a las propiedades curativas que estas tienen y que benefician nuestra salud.
Por ejemplo recientemente cuando transitaba cerca al Hospital “Félix Torrealva Gutiérrez" (Petita Ramos), me acerco al triciclo donde se expendía COCO con el fin de adquirir una rebanada de esta deliciosa fruta, pero otros se disponían a ingerir su agua buena para la salud cardiovascular e igual que la leche materna, entre otras propiedades.
Tamaña sorpresa me lleve cuando este comerciante trepana un Coco y le adosa un sorbete y se lo brinda a los consumidores que desean su poder desintoxicante y limpiar sus riñones de sustancia malignas entre otras. Acto seguido, el vendedor se disponía a fraccionar la deliciosa fruta cuya agua la había bebido el cliente y retacearla para ofrecerme una rebanada para mi consumo.
¿Qué hice, se preguntara Ud.? Simplemente, salí disparado quedándome con las ganas de paladear este fruto antes de coger por ingestión una enfermedad de algún portador ocasional de microbios.
Esta nota, esperamos que sea leída por alguna autoridad o funcionario del MINSA a fin que se realicen acciones de control como alguna vez se hacen respecto a vajillas, vasos, cucharas, tenedores, agua para su lavado, etc.
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